jueves, febrero 15, 2007

Yo quería ser mimo.


Hace un par de semanas, Elisa me puso en contacto con una de esas películas que uno espera con ansias desde que se entera que van a salir... Pero que al caminar por el destino que pone la vida frente a nosotros, vamos olvidandonos de esas películas hasta que alguien nos la pone de nuevo en el camino. Es decir, Elisa me vovió a poner en el camino de una de las aventuras fantásticas más atractivas, visualmente hablando, que recuerdo haber visto en toda mi vida. Se trata de la película de Mirrormask. Tenía la intención de hacer una entrada en el blog desde hace tiempo para dedicársela a esta película (que tiene sus cosas ñoñas), pero por cuestiones de salud, trabajo o simple fiaca, no había podido llevar a cabo.

La película de Mirrormask salió de la mente de un buen conocido del mundo friki: Neil Gaiman. Neil Gaiman ha trabajado haciendo guiones de comics y ha escrito algunas novelas (solamente he leído Coraline ) y algunas otras cosas que no sé de él, simplemente lo respeto mucho. Participó junto a Terry Pratchet para escribir una de sus alocadas aventuras novelescas así que con eso tiene mi respeto.

Según recuerdo, el libro de Coraline tenía una atmósfera muy bizarra y la novela que leí estaba acompañada de unas ilustraciones muy bonitas pero un tanto escalofriantes. Mirrormask no deja de ser la excepción.

Mirrormask ha sido convertida dentro de mi mente en la forma ideal de mi mundo imaginado. Durante el desarrollo de la película aparecieron ideas que definitivamente estan hechas para que la gente como yo se sienta identificada: la atmósfera surrealista, la dinámica del mundo bizarra, el hecho de estar viviendo en un mundo de papel, ideas y tinta, eso y más me dejó cautivado con ganas de ver más, lástima que no hay más mirrormask. En general, la historia es una visión introspectiva de una adolecente que está pasando por un momento muy difícil mientras su madre se encuentra enferma a causa de un tumor. En situaciones normales, ese argumento puede usarse para crear cualquier clase de película adolecente, lo interesante viene cuando la joven, su madre y su padre viven del trabajo en un circo, ¡Un Circo!.

La joven Helena tiene que enfrentarse contra sus inseguridades, miedos y demás cosas que tiene arrastrando en su vida en el mundo que ha creado en su imaginación... ¿o es en su pared?. El caso es que a fin de cuentas termina atrapada en un mundo extremadamente hermoso, donde los gatos son reemplazados por bellas esfínges de papel que piden libros para comer. Y hay un libro particularmente útil que te habla con fraces convenientes cada vez que abres una página. Simplemente hermoso.

En fin, tengo muchas cosas que decir al respecto, pero a decir verdad era escribir esta pequeña reseña de la película o estudiar para el exámen de Física Moderna que tengo mañana en la tarde... La elección fue hecha y ahora debo retirarme.

Espero poder extender este punto en un futuro, la película es muy bella y tiene un mensaje lindo incrustado en la frente; si tuviera frente, claro.

Quiero agradecerle a Elisa por haberme presentado la película, es extremadamente lindo encontrarse con esas sorpresas cuando uno anda por ahí respirando para vivir.

Hasta la próxima.

Saludos.

2 dementes:

Frey dijo...

Sí, quería ser mimo... triste realidad.

Edo dijo...

Nada cómo insultar un libro para llegar a la biblioteca ;3